Fue nuestra primera visita en el barrio. Se llama Iglesia suspendida porque está construida sobre las ruinas de la fortaleza de Babilonia que erigieron los romanos para servir como defensa entre el Alto y el Bajo Egipto. También recibe el nombre de Iglesia de la Santa Virgen.
La puerta principal está prácticamente enfrente de la estación de metro de Mari Girgis, y consiste en un precioso arco por el que se entra a un agradable patio. La fachada de la iglesia y las escaleras que conducen a ella están al final del patio.
También se puede entrar en la iglesia a través del jardín del Museo Copto.
El templo tiene estructura basilical, con dos torres y en el siglo XI fue sede del patriarcado copto. Todas sus columnas datan del siglo IV y están hechas de mármol blanco, excepto una que es de basalto negro.
El púlpito también está hecho de mármol y se compone de tres altares dedicados a la Virgen, a San Jorge y a San Juan Bautista.
Ha sido restaurada varias veces, la última en 1984.
Cuando entramos vimos que estaba decorada con globos y serpentinas. A nosotros nos chocaba un poco esa decoración en un lugar tan antiguo, pero estábamos en plenas navidades y aquí deben ver las fiestas de otra manera, ¿no?.
